En la vida es importante tener alertas que nos hagan saber cuándo algo no está bien, así se puede anticipar cualquier problema que surja. Pero no todas las alertas son de ayuda: una alerta que no sea clara o inmediata no es de mucha ayuda. Una alerta que me avise que algo falló hace 6 meses no es efectiva. Una alerta efectiva es la que me hace saber inmediatamente cuando algo no está bien.
Gálatas 6:9 dice: No nos cansemos, pues, de hacer bien; porque a su tiempo segaremos, si no desmayamos. Me quiero enfocar en la última parte del versículo: “si no desmayamos”.
No sé si te ha pasado, pero una vez me desmayé y no me enteré hasta que estaba tirado en el piso viendo estrellitas. Nadie me avisó que mi cuerpo estaba débil y que en cualquier momento podría desmayarme. Para prevenir esto, necesitaba algún tipo de alerta que me hubiera avisado con anticipación que algo no andaba bien.
Algo similar puede pasar en nuestro caminar con Dios, sin darnos cuenta podemos desmayarnos: podemos descuidar nuestra relación con Él o dejar de hacer el bien sin darnos cuenta. Muchas cosas en la vida nos pueden distraer y podemos terminar descuidando lo más importante: nuestra relación con Dios.
Pero hay algo que podemos hacer al respecto, algo que nos ayude a no desmayar en nuestra relación con Dios: podemos poner alertas efectivas que notifiquen y nos hagan saber cuándo algo no está bien en nuestra vida para tomar acción si estamos debilitándonos y debemos cambiar de rumbo.
¿Qué alertas podemos tener en nuestra relación con Dios?
Tres indicadores que funcionan como alertas para no desmayar en tu caminar con Dios.
1. ¿Cuándo fue la última vez que adoré a Dios estando a solas?
2. ¿Cuándo fue la última vez que le oré a Dios y que intercedí por la vida de alguien más?
3. ¿Cuándo fue la última vez que leí mi Biblia y medité hasta oír la voz de Dios?
Estas preguntas sirven para avisarte cuando tu fe se esté debilitando y estés caminando hacia un desmayo espiritual. Usa estas alertas para cambiar de rumbo y toma acción si te has alejado de Dios o no estás consciente de su gran amor para tu vida.
Para que las alertas funcionen y sean efectivas, considera lo siguiente: Una alerta ignorada no sirve de mucho, es necesario actuar pronto. No pauses tu alerta y comienza a moverte gradualmente. Busca tu tiempo de orar y adorar a Dios, lee y medita en la Biblia poco a poco. Puedes incrementar el tiempo que le dedicas a esto en forma gradual y disciplinada.
Si fallas un día, no falles dos días seguidos. Esto te ayudará a crear y a mantener estos buenos hábitos. Es posible perseverar y no desmayar en nuestra relación con Dios si tenemos alertas efectivas que nos ayuden a cambiar de rumbo cuando nos estemos alejando. ¡Alerta! No desmayes.
Por: Andy Sapper